☕El Café se enfría, pero aquí seguimos

Hay días que comienzan con prisas.
Con gritos internos pidiendo ayuda.
Con un café olvidado en la mesa porque las actividades cotidianas no nos dan tregua para tomarlo.
Mañanas ocupadas que requieren nuestra atención en todo… menos en nosotras mismas. Donde algo tan pequeño, pero tan nuestro como un café, no tiene espacio para disfrutarse.

Son esos momentos los que delatan lo mucho que estamos sosteniendo.
Una agenda que se desborda, emociones que no caben en la piel, y la sensación constante de estar corriendo detrás de una vida que va más rápido que nosotras.

Y sin embargo… aquí seguimos.

A veces seguimos por rutina, otras por responsabilidad, y otras simplemente porque no hay opción. Pero seguimos. Y ese seguir —aunque sea arrastrándose— también cuenta.
Aunque nadie lo aplauda.
Aunque no se vea en redes.
Aunque no nos reconozcamos en el espejo.

En mi caso, cuando todo eso se acumula, no me queda más que escribir.
Escribo para no reventar.
Escribo como un acto de humanidad hacia mí misma, como una forma de liberar presión de la cotidianeidad que abruma. Para poder entenderme, reconstruirme y volver a salir al mundo.

Y entonces, de pronto, entre tanta prisa por llegar a donde nadie te espera, aparece un Gustavo cualquiera.
Alguien que te hace reír con su simpleza.
Una carcajada que se escapa sin permiso, pero te recuerda que aún puedes sentir. Ese Gustavo —que podría llamarse Pedro, Juan, o no tener nombre— llega en el momento justo, como una pausa que no pediste, pero agradeces.

Esos momentos bizarros que parecieran no tener cabida en tu día, y sin embargo… lo transforman.
No porque resuelvan algo, sino porque te regalan oxígeno.

Porque sí, el café se enfría.
Los pendientes se acumulan.
Podemos sentir que no damos una.
Pero aun así… aquí seguimos.
Corriendo, dudando, sosteniendo.
Intentando alcanzar una vida que se nos escapa… mientras, en el fondo, nos vamos reencontrando.

¿También has tenido mañanas como esta?
Me encantará leerte en los comentarios, si quieres compartirlo.

Julio 03 del 2025

💬 ¿Te resonó algo de lo que leíste? Me encantará leer tu experiencia, tus ideas o simplemente saber que pasaste por aquí. Este espacio también es tuyo. ¡Gracias por estar! ☕✨

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *